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              SABORES BAJO CERO

              La refrigeración y congelación son procesos ideales para conservar los alimentos. Aprenda cómo sacarles el mejor provecho para tener siempre a mano productos en sus mejores condiciones. 
               
              Mucho se habla de lo beneficioso que puede ser un alimento, pero pocas veces nos detenemos a pensar en cómo su almacenamiento o manipulación pueden convertirlo en una amenaza para la salud. Estos son algunos mitos y realidades para tener en cuenta a la hora de ‘medir la temperatura’.  

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              ALIMENTOS CALIENTES
              MITO: No se deben introducir alimentos calientes en la nevera
              REALIDAD: Los aparatos de refrigeración están hechos para tal fin. De hecho, parte de su función es agilizar el descenso de la temperatura para evitar la proliferación de microorganismos que se reproducen entre los 5°C y 60°C por lo tanto la refrigeración es una gran herramienta para controlarlos y no es conveniente ‘enfriar’ a temperatura ambiente. 
              VEGETALES Y FRUTAS
              MITO: No se deben mezclar los vegetales y las frutas en la nevera
              REALIDAD: Tanto las frutas como las verduras poseen en su cáscara un mecanismo natural de protección. Lo ideal es ubicarlas en los compartimientos de la nevera diseñados especialmente y clasificarlas por la delicadeza del producto. Las más firmes y resistentes deben estar abajo, mientras que las más blandas y frágiles deberían quedar encima de estas. 
              VOLVER A CONGELAR
              MITO: Un alimento descongelado no se debe congelar nuevamente
              REALIDAD: La congelación no elimina los microorganismos sino que evita su proliferación, así como los procesos de degradación normales de los alimentos. Por eso, cuando una comida se descongela estas circunstancias se ‘reactivan’ y es necesario prepararla o consumirla en un tiempo prudente. 


              ABRIR LA PUERTA
              MITO: Abrir muchas veces la puerta de la nevera daña los alimentos
              REALIDAD: El problema no es tener una familia numerosa que abra muchas veces la puerta. El verdadero riesgo es dejar la puerta abierta durante mucho tiempo, esta práctica si puede alterar la cadena de frio de los alimentos y ser perjudicial. Por esto cada vez más fabricantes integran en sus diseños una alarma para dar aviso. 
              DESCONGELAR
              MITO: Es peligroso descongelar los alimentos a temperatura ambiente
              REALIDAD: Lo ideal es que la descongelación de los alimentos se haga por refrigeración, es decir, pasarlos del congelador a la nevera y dejarlos por un lapso de 24 horas. 
              MEZCLAR ALIMENTOS
              MITO: No se pueden congelar las frutas y verduras
              REALIDAD: La mejor técnica para congelar verduras (brócoli, habichuelas, zanahorias) y frutas (piña, fresas, moras, duraznos) y mantener la mayoría de sus propiedades es sumergirlas por 1 minuto en agua hirviendo con unas gotas de vinagre. Pasarlas de inmediato a agua fría y llevarlas a congelación en bolsas herméticas.

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              FECHA DE VENCIMIENTO
              MITO: No se puede consumir un alimento refrigerado si se ha cumplido la fecha de vencimiento
              REALIDAD: La fecha de vencimiento es el tiempo que el fabricante del producto puede otorgar como garantía de calidad y propiedades intactas. Para esto se realizan una serie de pruebas antes de sacarlo al mercado. Sin embargo, días después de esa fecha el alimento puede seguir siendo apto para consumo humano vigilando sus propiedades organolépticas (color, sabor, olor etc)