LA EDAD DE HIERRO


              Los sartenes y las ollas de hierro son uno de los utensilios más preciados en la cocina si aprendemos a sacarles el mejor provecho. ¡Con algunos trucos de uso puedes tenerlos para toda la vida y cocinar como un verdadero experto!


              No sólo son hermosos por su apariencia robusta y sencilla sino por su versatilidad a la hora de cocinar. Los sartenes de hierro son excelentes para usarlos en cualquier tipo de estufa, pero además dan resultados increíbles cuando se llevan al horno o se utilizan directamente sobre una parrilla de gas, leña o carbón. Difícilmente pierden su forma y contrario a otros utensilios su uso constante y el paso del tiempo mejoran su desempeño. Por si todo esto fuera poco se consideran muy seguros a la hora de evitar accidentes en la cocina ya que su buen peso garantiza estabilidad sobre las superficies de cocción.

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              Al elegir un sartén de hierro lo ideal es que esté hecho de un solo cuerpo, sin ningún tipo de tornillos o piezas adicionales. Su capacidad para retener el calor hace que puedan precalentarse lo suficiente sin sufrir daño alguno, por lo que son ideales cuando se quiere sellar una carne y obtener esa caramelización exterior de las proteínas que se logra con un poco de paciencia y muy buena temperatura.

              ANTES DE ESTRENAR

              ¡BUEN PROVECHO!

              Entre más se trabaje con el sartén de hierro, mucho mejor. Cada uso irá generando una especia de capa o patina que funciona como antiadherente natural, sin necesidad de químicos  o materiales adicionales. Es un proceso que se conoce como curado y hace toda la diferencia en estas herramientas culinarias. Antes de estrenarlo  los expertos sugieren hacer el siguiente tratamiento:

              • Precalentar el horno a 200ºC.
              • Lavar el sartén con un poco de jabón y agua caliente y secarlo con un papel asegurándose que no queden residuos.
              • Untar el sartén generosamente con aceite de girasol no solo en la parte interior, sino exterior incluyendo mangos y agarraderas.
              • Poner en el horno aproximadamente por 45 minutos.
              • Apagarlo y dejar enfriar el sartén dentro del horno.

              CONSEJOS & TIPS DE USO

               

              • No lave sus sartenes de hierro en la máquina de lavar platos.

              • No los deje en remojo.

              • Tan pronto termine de usarlos, lávelos con agua y una esponja tipo estropajo.

              • Si tiene mucha suciedad utilice un puñado de sal para frotar y eliminar residuos.

              • Séquelos después de lavarlos y nunca los guarde húmedos para evitar la oxidación. Muchos cocineros los secan usando el mismo fuego de la estufa para evaporar cualquier residuo de agua.

              • Haga el proceso de untarlos  con grasa de vez en cuando para mantener su capacidad antiadherente natural. Los mangos  y asas de los sartenes de hierro se calientan bastante, proteja sus manos cuando vaya a manipularlos.